1. Apuestas es cuaotas al alza: aprovecha la oportunidad cuando la veas
Hay trenes que solo pasan una vez en la vida, y eso es lo que pasa con las apuestas direccionales. La clave está en que la probabilidad implícita de la cuota que ofrece la casa de apuestas sea inferior a la probabilidad real de que se de el resultado pronosticado, es decir, que la apuesta tenga valor. Aunque las bookies establezcan una cuota antes del partido, esta oscila y muchas veces se ven obligados a aumentarla, lo que aumentará tus opciones de triunfar. Es lo que pasa cuando en una apuesta a 1X2 la cuota visitante es de 2.0 (50% de probabilidades) pero sube a 2.2 (45%) porque los apostantes se decantan por el 1 o la X. Por eso hay que analizar la evolución de las cuotas.
2. Las cuotas bajas no siempre son apuestas seguras
Dice la leyenda que con una cuota baja tenemos el verde garantizado, pero esto no es así. Por ejemplo, con una cuota de 1.05, habitual en deportes como el tenis, las opciones de que salga es del 99,05%. Sin embargo es una apuesta sin valor, que tampoco nos sirve para mejorar cuotas en torno a 1.5 y que pondrá nuestro bankroll en peligro. Al dar por seguro el verde invertimos en la apuesta más de lo que deberíamos, poniendo en riesgo un alto porcentaje de fondos para obtener unas ganancias mínimas que no siempre acaban saliendo. Las cuotas tan bajas no tienen ningún valor y no te ayudarán a ganar dinero apostando.
3. Enfócate y vuelvete un maestro en un mercado
Hay que diversificar las apuestas (no pongas todos los huevos en el mismo cesto), ya que así se reparte el riesgo, pero puedes especializarte en un deporte o un mercado concreto. Por ejemplo, si te gusta el boxeo puedes especializarte en apuestas al noble arte; si eres seguidor de la Premier lo puedes hacer en el fútbol británico… Hace unos años hubiese sido muy complicado, pero tienes a tu disposición todos los medios necesarios para seguir una competición o deporte y especializarte en ella. Recuerda que cuanto más la conozcas más fácil te será acertar con tus apuestas, y más opciones tienes de ganar con ellas.
4. Apostar con cabeza fría y no con el corazón
Todos recordamos aquel anuncio de la Quiniela donde un jugador celebraba la derrota de su equipo porque había acertado el Pleno al 15. No hace falta llegar a ese extremo, pero sí que apostaremos con la cabeza y no con el corazón, aunque a veces sea lo más tentador. Tenemos miles de deportes y mercados en los que podemos apostar, así que no tenemos por qué limitarnos a nuestro equipo, por mucho que sea el que más conocemos. Cuando apostamos por nuestro equipo solemos hacerlo por el resultado que nos gustaría ver, no por el más probable, así que busca otros mercados y disfruta al máximo de tu equipo sin que afecte negativamente a tu bolsillo.
5. NO HACER apuestas combinadas
Una apuesta combinada no deja de ser la suma de apuestas, y cuantas más variables añadas al boleto de apuestas, más opciones tienes de perder. Claro, que a medida que nuestra combinada crece en variables también lo hace la cuota y no son pocas las casas de apuestas que nos ofrecen un bonus a partir de cierto número de selecciones. La cuota final es muy atractiva, y puede salirte una o dos veces, pero a medio y largo plazo las apuestas combinadas te provocarán pérdidas. Lo más fácil es que acabes perdiendo, incluso combinando selecciones con cuotas muy bajas, de esas que casi no tienen ningún valor. Esto también es aplicable a las apuestas de sistema.
6. Evita las apuestas en directo
Ya hemos hablado de la importancia de apostar con la cabeza, de analizar las apuestas, la evolución de los mercados, etc., así que… ¿podemos apostar en directo? Todas las bookies no ofrecen la opción de apuestas en directo, pero hay que ir con mucho cuidado porque cuando apostamos en vivo nos dejamos llevar por nuestros impulsos y emociones, y eso es algo que no nos lleva a ninguna parte. Difícilmente conseguirás ganar apostando en directo, así que si de verdad quieres ganar dinero con tus apuestas limítate a las apuestas prematch.
7. Tipsters: no todo vale
Todo el mundo es capaz de dar un pronóstico para un evento deportivo. Incluso tú puedes hacerlo, pero eso no garantiza que vayas a acertar. Los tipsters juegan un papel muy importante en el análisis previo de muchos apostantes ya que aportan datos y estadísticas imprescindibles para el éxito de la apuesta.
Pero la red también está llena de tipsters de dudosa reputación, muchos de ellos de pago, así que antes de arriesgar tu dinero siguiendo los consejos de estos pronosticadores deberías conocer al tipster, el porcentaje de éxito que suele tener, en qué mercados está especializado, yield, etc. Y analiza tú también la apuesta y decide si te convence, no la sigas solo porque te la aconseja un tipster.